jueves, 22 de diciembre de 2016

¡Hasta el año que viene!

Antes de despedirnos, nos acercamos a la capilla para tener una pequeña oración. 




"Yo soy la luz del mundo"

 El mensaje de Jesús es un mensaje de esperanza, de luz para los que se encuentran en tinieblas, de alegría para los que están tristes. Por eso tiene sentido la navidad, porque recordamos que nos trajo ese mensaje, ese evangelio, esa buena noticia. La pregunta que tenemos que hacernos es si nosotros ¿Somos luz para los que nos rodean? Para ser luz no hay que hacer milagros, el milagro estaría en que todos, como los protagonistas del vídeo, fuésemos capaces de compartir algunos de los momentos de nuestra vida para, desinteresadamente, ofrecer una mano, secar una lágrima o sacar una sonrisa a aquel que más lo necesita. ¿somos luz? ¿queremos ser luz para los demás? ¡Seguro que sí!

¡FELIZ NAVIDAD!

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